Psicodinamika: ¿Cómo vemos la ansiedad en psicoanálisis?

          Si hay una problemática moderna por excelencia esa lo que llaman ansiedad. Diccionario en mano, sería una respuesta de anticipación ante un acontecimiento futuro, así como la tristeza referiría al pasado y el estrés al presente.

          Se caracteriza por una sensación de angustia leve o miedo, y la aparición de aceleración del ritmo cardíaco y la respiración, sudoración, dolor o sensación incómoda en el pecho, incluso puede derivar en pánico, paralizando a quien lo sufre. Es muy habitual en estos tiempos de confinamiento (Si lo sientes,ver: Confinamiento, coronavirus y conexiones psíquicas).

                Desde el psicoanálisis podemos decir que estos síntomas se corresponden más a angustia que a la mal llamada ansiedad. Angustia, de siempre conocida por sus síntomas, que perfectamente pueden ser los descritos anteriormente, angustia puesta en el cuerpo como lo psíquico tomando el cuerpo (soma), es decir un síntoma psicosomático. Por eso el dolor en el pecho y demás.

                Es desagradable, sin duda, pero los psicoanalistas sabemos que la angustia es un motor que nos mueve, que nos mueve en la vida (para aplacarla) y que nos mueve a veces también a buscar un especialista. Otra cosa que sabemos los psicoanalistas es que el síntoma, como todo lo que trae el paciente, hay que escucharlo. El relato del paciente nos desplazará hacia el origen de su sufrimiento.

                Otros tratamientos apuntan a la lucha directa con el síntoma, se entiende que es un problema que genera sufrimiento y algo hay que hacer con él, pero sino se tira de él hacia atrás, el otro eslabón con el que se asocia permanecerá oculto. No es que en psicoanálisis ignoremos el sufrimiento del sujeto, pero digamos que no podemos centrarnos sólo en apagar el incendio porque de sus mismas causas nacerán otros incendios hasta que se anulen las mismas.

                Esta angustia y sus reacciones se distinguen por la ausencia de objeto, es decir, no es que sienta angustia por la crisis, el virus, etc... Siento angustia y no sé por qué, así que eso dificulta el vencerla. Si fuese: Tengo angustia porque no tengo amigos, puedo enfocarme en conseguir amigos. Pero en este caso el objeto es un saber no sabido, y está en el inconsciente. Sólo escuchando podremos averiguar lo que le pasa al paciente, él nos lo dirá si permitimos un espacio de asociación libre donde pueda encontrarse con su discurso y el analista, como un faro, alumbrará y guiará al analizante en ese viaje hacia dentro.

                 De esta forma, por más miedo que dé, puede desmitificarse el síntoma. "La ansiedad es parte de la vida", decía un psicoanalista. Es decir, quizá no consiste tanto en querer acabar para siempre con esa sensación sino escucharla y aceptarla, aceptarse. De esta forma pierde fuerza como la sombra que acecha gigante hasta que uno se gira a mirarla.

                Pensando en esto siempre se me viene a la mente un diálogo de la película de Matrix donde Neo le pregunta a Morpheo si podrá llegar a esquivar las balas. Morpheo le contesta que si llega a ser el elegido ni siquiera necesitará hacerlo.

                Siguiendo el símil digamos que hay toda una industria de tratamientos farmacológicos y psicológicos para "esquivar las balas" cuando quizá se trate de escuchar y de escuharse para, entre otras cosas, ponerle un objeto a esa angustia y hacer algo con ella. Los psicoanalistas vienen a suscribir la respuesta de Morpheo.

                 En otro escrito veremos porqué quitar un síntoma sin más no es gratis, cuando hablemos de economía psíquica y también analizaremos lo que esta angustia nos puede estar diciendo.

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Luis Martínez de Prado.

Psicólogo / Psicoanalista / Formador.